Vivir la vida.
Playa de Benirrás.
Esta bahía protegida es un popular punto de amarre para barcos y yates que desean admirar las impresionantes puestas de sol acompañadas con frecuencia por sonidos de tambores. Esta reunión de tambores es una experiencia única de Ibiza, asentada después de muchos años.
Cuando estamos viviendo la vida no nos damos cuenta, pero al volver a la rutina empezamos a recordar aquellos momentos por lo que merece la pena vivir la vida.
Estos últimos tres meses de verano, pasados en compañíaa de mi familia y amigos, tuvieron esos momentos. Sensaciones primarías, recuerdos, emociones, alguna que otra sorpresa y como no también alguna contradicción. .
Un verano vivido entre el Ampurdán e Ibiza.
En el Ampurdán, me sentí humana cariñosa, cuidadora de los que más quiero, divertida infantil y juguetona; responsable y amiga de los mios, invitaba a merendar a los amigos de mis nietecitos, montaba juegos, gincanas, me sentí infantil. si amigos, uno se puede sentir como un niño y es la forma de jugar con ellos. No hay otro secreto... También he tenido una sensación estupenda tocando y experimentando al ir a clases de cerámica, tocar y trabajar con el barro, es un placer para el tacto....
En Ibiza, me he divertido en esa maravillosa isla Pitiusa, que cada vez que la conozco más, más me gusta. Preciosa, viva, joven, acogedora y única. Calas maravillosa, con arenas finas y aguas transparentes que brillan cuando la Luna llena las baña y reflejan destellos dorados en la noche calurosa, que invitan a bañarse, las puestas de sol en Ibiza son un espectáculo único, las personas lo saben las aplauden y las adoran tocando tambores como festejando un ritual...( Benirrás).
Esto es vivir la vida.......... con naturalidad, sin competencias ... ojalá sepámos hacerlo mas amenudo, el mundo sería nuestro, más limpio y podría estar bien............ ¿ No creen?.
AFigueiral. Septiembre 2011